"LA TIBIEZA DE MI CORAZÓN"
En ese momento de vida sentí incertidumbre, ¿a qué me estaba enfrentando?, yo pensé que
esto de limpiar el corazón era sencillo, pero me di cuenta que tenía que cortar
de raíz muchas cosas; situaciones, apegos, sufrimientos, ataduras,
resentimientos, formas de vida etc., las cuales estaban allí alojadas, muchas
de éstas acomodadas y con unos cimientos muy sólidos. También, descubrí que por
un sufrimiento muy grande, una parte de mi corazón se había endurecido, porque al comienzo, no
manejé ese dolor desde la fe sino sólo desde lo humano. “Examíname, oh, Dios mira mi corazón, ponme a
prueba y conoce mi inquietud; fíjate si es que voy por mal camino y condúceme por
la antigua senda”. (Salmo 139, versículos
23 y 24).
Entonces, entendí, que Dios toca nuestro corazón para
transformarlo. Unos 12 años atrás, Dios
había tocado mi corazón, pero sólo hasta el día de hoy, tuve conciencia plena del significado de
esto. Para esa época estaba recién casada y vivíamos con mi esposo en Australia, y fue allí donde descubrimos la
gracia de vivir la fe en medio de una Comunidad Católica llamada “Emmanuel”, que nos
enseñó, que ser cristianos, no sólo era ir a la Santa Eucaristía los domingos,
No! Había mucho más para conocer, vivir, sentir, recibir y para dar. Sin embargo,
mi fe no estaba del todo fortalecida, mejor dicho era una católica TIBIA.
Tibia, este estado es considerado como la enfermedad más peligrosa de la vida espiritual. Que palabra tan fuerte, y en la Sagrada Biblia en, Apocalipsis 3:15-16 dice: "Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojala fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca”.
Y, así, estuvo mi corazón por muchos años. ¡No amaba al Señor mi Dios
con todas mis fuerzas, con toda mi alma ni con toda mi inteligencia!!! Lo amaba
a medias… que tristeza! Pero, entendí que sólo cuando descubres la fuerza del
amor de nuestro DIOS y decides corresponderle totalmente, podrás iniciar
entonces, la limpieza de tú corazón. De otra manera es imposible!!! "La Santísima Virgen nos tiene en su mano pero también en su corazón. Ella camina en la vida con nosotros, ella nos conduce al corazón de Jesús".
¿ESTA TIBIO TÚ CORAZÓN?
Dios toca nuestro corazón, a través de estas publicaciones te mostraré algunas herramientas fáciles para poder llegar a entregar nuestro corazón a él. Sígueme cada semana en este blog. Para la gloria de Dios.
ResponderBorrarGracias Dorisita por tus palabras llenas de fe y animo para el caminar... te encargo me incluyas en tus oraciones para que el Buen Dios nos saque de la tibieza en que vivimos y nos decidamos definitivamente por él....
ResponderBorrarUn abrazo,
Oscar D.